Preparatoria 11
La paranoia aquí existente influye en mi tapete; se niega a que lo pisen, no sabe que para eso sirve.
Sin razón ni música alguna, mi muñeca baila, como ejemplo de lo que no debería ser; sus zapatos de charol se desgastan.
Mi cesto de ropa sucia maúlla y escupe calcetines.
La puerta canta, no rechina, se siente culpable; ayer, por accidente, aplastó un grillo y quiere suplirlo.
Mis tenis, bajo la cama debaten, tienen personalidad múltiple; ambos se creen derecho e izquierdo.
El lápiz tiene flojera de escribir más, tiene como excusa al desastre total.