La ópera sin lagos subterráneos / Ángel Ortuño

 

quéjese el nervio con cántico süave
Gabriel Bocángel

 

Afirman que el actor desfigurado
se ha vuelto más amable

Una mano cortada o una pierna
disminuyen el alma

         —ya lo dijo Lucrecio

Desde entonces se sabe inhabitable
como fiesta en la alberca
de los átomos rotos
y el puente de algodón donde el vaho de la fiera
perfuma señoritas que no saben nadar.

 

 

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