Preparatoria15
Dime lo que escuchas, dime si la has visto llorar,
en tu bello y frío silencio, qué secretos has de mirar.
Tal vez has visto que ella me mira con ojos de ternura
y el sólo pensar en eso es la peor de las torturas.
Te pregunto siempre, jamás respondes, callada
sólo dime si me ama, si soy correspondido por mi amada.
Envidia, sí, envidia siento por todo lo que sabes de ella,
¿por qué no puedo ser como tú?, una simple pared de escuela.
Junto a las otras han de mirarle durante las cinco horas
y saber de su persona hasta lo que ella misma ignora.
Cuéntame sus secretos, cuéntame en los que intervengo
háblame de ella, y a cambio te regalaré todo mi tiempo.
Cuando se recarga en ti, dime qué sientes al tocar su piel
y, cuando te palpa, probar de sus dedos una dulce miel.
Quién sabe lo que sabes, quién me lo puede decir.
Eterna estudiante, cuéntame tus secretos y déjame vivir.