Dos poemas/ Rafael Cadena

DE TODAS MANERAS

Memoria apoderada del instante,
memoria que tiñes todo lo naciente,
memoria que te enseñoreas del vivir,
memoria alimentada con la eternidad
que no era para ti, tú me has creado,
no podré sostenerme sin tu peso,
pero me secuestras, tus rejas se extienden
por mi cuerpo, no me dejas salir,
eres mi límite.
Necesito una cara para andar
entre la gente y es tuya.

Sin ti no soy nada.

Contigo no soy nada.

 

AGRADECIMIENTO

Colinas detrás de los edificios,
bambúes todavía incólumes,
monte al lado del estacionamiento,
pinos aferrados, con raíces al aire, milagrosos,
pájaros que oigo como si cantaran en el libro que leo,
gracias por estar todavía ahí.

Uno vive despidiendo cosas
que los hombres no quieren tener.

 

 

Comparte este texto: