cuando viene la libertad
de las raíces alrededor
y la crueldad de su ausencia
hay un caminito
que puedo andar
casi a ciegas
raconto y queda
en la memoria
quien sabe, pero no
pero sí mientras la fe
se agranda
Fanny Bonder con su hija
mi abuela y su hija, mi madre
en una línea de fuerzas
me entregaron a la vida,
pómulos altos y adentro
el run run del tempo
con el que una debe criar
yo me animo
precisa las dibujo
con luz en mis espaldas
tantas gracias
mis hadas rusas
¿dónde es que resuenan
sus vidas
si no es en estos huesos
que llevo hacia adelante?
soy su descendencia
Fanny mira su cielo celeste
vestida de negro
se ilumina con las flores
que le trajera su hija, mi abuela
en vez del vuelto de las papas
negras sobre la mesa
mi madre está agachada
en la tierra, embelleciendo
el mundo, dando oxígeno
y aliento a cada rincón
Aída, mi abuela
se queda en el centro
mira de cerca
mi juventud, rige
las notas que van sonando
y es tan dulce,
la última que me vio crecer
de este lado del mundo
su presencia
es el perfume a hadas
que jalan hacia mí
o lo que no pueden
nombrar ellas pero yo sí
las alas
las llevo adentro
hasta que me toque
desprenderlas.