Si Evita viviera sería Montonera gritábamos
con mi amiga Ágata cuando en el balcón de Gaspar Campos
apareció Perón y dijo lo que dijo.
Nosotras dos adolescentes en pogo estuvimos ahí.
Pero a quién le importa ese dato si también hay
otra línea más pesada más realista
que a veces se pierde y otras veces
sin esperarlo como en los sueños retorna
pero cambiada.
Soñé con Arturo Carrera
es un amigo de mi generación literaria
me susurraba en italiano palabras al oído
era excitante.
Ud. puede viajar a Italia a ver si ahí encuentra el amor
interpreta la analista buscando que acabe
la novela de mi vida para que por fin empiece
su realidad.
Arturo no era Arturo porque nunca
en los sueños los que vemos son los que vimos
y de mi generación literaria el pasado me impone
complicidades guiños contraseñas
que los que no estuvieron ahí
nunca entenderán.
Eso me obliga a hacer siempre el mismo recorrido:
psicoanálisis, literatura, teoría, política…
y aunque muchos jóvenes se fascinen con nuestra época
es un hecho que nosotros
tenemos la cabeza quemada.
(Cuando hago un esfuerzo por pensar de otra manera
lo hago por mis hijos
no quiero hablar como vieja pero tampoco quiero
que lo hagan ellos. Tampoco quiero hablar
como joven pero sí quiero que lo hagan ellos.
Mi contraseña incluye sus iniciales.
Si entro ahora puedo abrir otra línea de lectura,
pero ellos, sólo ellos, me la pueden habilitar).