(Ciudad de México, 1979). Su título más reciente son dos libros de poemas reunidos este año, y en un solo volumen, por el sello español Pre-Textos: Ejercicios de respiración y El Estado empresario mexicano (de este último se desprenden estos poemas).
AHORA
ahora qué
ahora qué sigue
es muy pronto al principio
atravesarlo acomodar las cosas
uno ni está no sabe qué decir
lo que nos queda
como una silla a la que no le falta una pata sino quién va a
sentarse
no se está preparado aunque lo veas venir
y todo el tema de esperar no te hagas el fuerte el que no oye
tú sabes cuánto me tardé fueron años
y especialmente el padre con el que uno tiene
me reconozco lo que es duro y nadie
te enseña te acompaña te empuja a tu niñez
de vuelta lo sé créeme no es cualquier asunto
y todo mundo tiene una respuesta todo mundo pregunta
cómo vas en qué puedo ya pensaste
lo que pasa te está pasando a ti
lo que pasa no incluye al que se fue
no te adelantes ni eches para atrás
recuerde el alma avive el seso etcétera
hacer las paces la tuya la de él
y si te llama sólo si te llama
y así fue plazoleta pedro m. obligado buenos aires
en el mismo lugar donde llegamos por primera vez con una diferencia de
treinta y siete años
aquí empezó a dos meses de que hubiera
el pavor del recién
la libertad del que ya nunca
el amor de una parte
la vergüenza del hijo maricón por eso lo viril supuestamente hiciste lo que
había
el hijo es enfermero no tiene sexo como las muñecas
los papeles se invierten pero nada de nada es ejemplar
un hijo no se acuesta sino al lado
la pareja es el novio el femenino hace que dude tal vez no
un hijo tiene la vida tan privada y un padre es obra pública
se le ve desde lejos como un padre un abuelo un proveedor
aunque esté jubilado aunque el pañal la sonda y las pastillas como piedras
un hijo sube y baja tiene la fuerza del que se equivoca
un padre baja más sube menos corrige las verdades
el hijo desde lejos es un bastón de cerca es una astilla
no tiene las respuestas pero sí una edad productiva puede con eso y más no
tiene hijos él es solo no hereda sobrevive a los suyos
mal que bien como tú hizo lo que tenía
y ahora a lo que sigue
FUI josé antonio bravo gonzález abogado primer lugar en el concurso nacional de oratoria diputado suplente esposo de la momis y padre de toñito y de nanchito su josefo su pa su don bebé treinta años en farmacias el fénix como asesor jurídico toqué mal la guitarra tenía buena voz me sabía el monólogo de segismundo pasajes del derecho romano en buen latín fumé sesenta años me entretenía viendo series de policías y recibí la extremaunción en mi cama de urgencias y aunque resucité por unos meses el aire se hizo tímido y el tiempo visionudo lo último que recuerdo es mi mano en el hombro de la momis creí en el cielo doce de mayo día de la enfermera horas antes del sol voy para allá
CELAYENSES que con místico acento lo reciben al lado de los suyos al lado de la vida sus cenizas eso que se parece a lo que está debajo de la cama y el refrigerador el hijo pródigo apocado vuelve a los árboles rectangulares al viva cristo rey a los desmesurados medidores de luz háganle un hueco celayenses pueden tirar cabezas otro día hornear pasteles de cajeta otro día jugar golf en el campestre háganle honores como puedan háganle un favor un espacio que viene de pedir deshecho quiero ir a celaya quiero pasar con pedro ana maría y gregorio quiero quedarme entre las bolsas negras entre los frascos duros entre palos pelotas y zanates entre josé antonio no viene a decir nada no les viene a hacer sombra no se cayó para que lo levanten no se pongan de pie tengan un gesto denle aire viene con un respirador pero se le acabó la batería viene sucio obstinado no hay quien lo cambie quién podría hijos de mil alcen la mano buenos samaritanos del bajío alcen la voz no vaya a ser que no los oiga el oído finísimo hecho polvo de mi padre que aguarda el paso por el puente de tresguerras a que baje el calor que espera no volver al menos a la forma que tenía la forma no depende de ustedes sus paisanos el fondo es otro asunto tan abajo que sólo él lo sabe ES esto lo que sigue es esto es que cuando regresemos habrá mesas y sillas transparentes un jardín repentino meseros que comienzan a cantar estarán los cristeros de manta con tu padre tu madre y tus hermanos y tú saco y corbata vela de comunión peinado con jugo de limones zapatos como espejos y todos brindarán sin sombras en el césped hasta entrada la noche que ya se te olvidó