Poemas /James Knight

De La libertad creativa en el siglo xxi: un estudio  enciclopédico

Poesía
La poesía es el crecimiento de un mundo contenido en una palabra; es también el proceso de reactivación de la maquinaria metabólica de la palabra, que resulta en la aparición de las neurosis y el asombro. La palabra es un pequeño paquete producido en una matriz imaginaria luego de una serie de procesos automáticos que están más allá del control humano. Todas las palabras desarrolladas completamente contienen imágenes y muerte, envueltas en una capa usada. Algunos poemas producen un número variable de palabras a las que les faltan embriones; éstas son signos latentes que nunca detonan. Los signos latentes son cuerpos maduros que no germinan porque están sujetos a condiciones medioambientales externas que impiden la iniciación de procesos metabólicos y crecimiento semántico. En condiciones adecuadas, la palabra comienza a germinar y los tejidos embrionarios reanudan el crecimiento, desarrollándose hacia una revolución o fenómeno social de similar paroxismo.
     La germinación de la palabra depende de condiciones externas particulares. Los factores externos más importantes incluyen internet, libertad sexual, activismo político y, algunas veces, el fetichismo libresco. Poemas diversos requieren variables diferentes para la exitosa germinación de la palabra. Con frecuencia esto depende de la variedad de la palabra individual y está vinculado estrechamente a la política de identidad del hábitat de un poema. La respuesta a la futura germinación de algunas palabras se ve afectada por condiciones medioambientales durante la formación en la boca o en la mente; la mayoría de las veces estas respuestas son tipos de conformidad.
     El internet se requiere para la germinación. Las palabras maduras son con frecuencia extremadamente secas y necesitan un número significativo de «me gusta», relativo al peso seco de la palabra, antes de que el metabolismo verbal y la diseminación de los memes se puedan reanudar. La mayoría de los poemas necesitan suficientes «me gusta» para vigorizar las palabras, pero no los suficientes para fracturarlas.
     La libertad sexual es requerida por las palabras que germinan para el metabolismo. Algunas palabras tienen capas impermeables usadas que previenen que el deseo entre, causando un tipo de letargo físico que se rompe cuando la capa se desgasta lo suficiente para permitir el intercambio de fluidos.
     El activismo político afecta el metabolismo verbal y las tasas de crecimiento. Las palabras de diferentes características demográficas e incluso las palabras del mismo poema germinan por encima de una amplia gama de lealtades políticas. Las palabras muchas veces tienen un alcance político dentro del cual germinarán, y no germinarán a la izquierda ni a la derecha de dicho alcance. Las palabras que dependen del activismo político para terminar con la pasividad exhiben un tipo de letargo semántico.
     El fetichismo libresco puede ser un detonante para la germinación y es un tipo de nostalgia. Sin embargo, a la mayor parte de las palabras no la afecta la existencia de los libros.

 

De Apagones [fragmentos]

Cómo hacer un poema

Para mejores resultados, necesitará una lupa y el sol. Si no están disponibles, servirá una caja de cerillos o un encendedor.

Primero, haga un montoncito de hojas secas, varas y otros objetos inflamables de su jardín. Opcionalmente, rocíelos con petróleo o alcohol.

Enseguida, coloque su montoncito en una superficie plana y enciéndalo.

Manténgase a buena distancia y observe las llamas.

Los poemas avanzados requieren materiales más ambiciosos, por ejemplo un libro, un tablero de ajedrez, un árbol o una casa.

No se preocupe si su poema no rima o no tiene ningún sentido, o si todo su vecindario se consume en una conflagración. Se le salió de las manos. Un poema no puede ser controlado por su creador.

 

Cómo hacer la chamba que odia sin asesinarlos a todos

Primero, asegúrese de que su máscara esté bien puesta en su lugar antes de salir de casa por la mañana. Si intenta ponérsela más tarde, se sentirá turbado y puede que no se pegue.

Cuando llegue a su lugar de trabajo, salude con calma a todos los que se encuentre. Imagine que son tan sólo figuras de un sueño.

Realice sus tareas como si fueran juegos. El objetivo es ganar, pero jugar es lo importante. Haga su mejor esfuerzo, pero no se lo tome demasiado en serio.

Aproveche al máximo las pausas para el café y la hora del almuerzo. Hable en voz alta a través de su máscara. Tome estos momentos como otro juego: fingir que le cae bien la gente. Establezca una distancia irónica entre usted y el personaje que está interpretando. Ríase de su incapacidad para ver a través de su máscara; pensarán que está siendo amable.

Si en algún momento siente que su rabia aumenta, diríjase a un espacio interior que contenga una réplica exacta de su lugar de trabajo y sus moradores y destrúyalo. Lo ideal es que le prenda fuego.

 

Cómo escribir una novela

Vacíe el contenido de la caja encima de la mesa.

Coloque la tapa de la caja boca arriba sobre la mesa. La imagen de la tapa es lo que debe emular.

De manera muy, muy lenta, ensamble las piezas. Asegúrese de que todas las piezas encajen perfectamente con las adyacentes y de que usted no se desvíe de la imagen que se encuentra en la tapa de la caja.

En la primera oportunidad, dígale a la gente que está escribiendo una novela. No se enoje cuando expresen alegría o falta de interés.

Continúe ensamblando. Dígase a usted mismo que éste es un trabajo importante y no un mero pasatiempo.

Haga una pausa de vez en cuando para relajarse y admirar su obra.

Un lapso de tiempo considerable pasará antes de que termine su novela. No se apure: la prisa lleva al error. Continúe regresando a la mesa, a la imagen que está intentando recrear, a su trabajo en proceso, a la maraña de piezas por colocar.

Recuérdele a la gente que usted está escribiendo una novela. No se enoje cuando expresen su sorpresa porque aún no la ha terminado.

Cuando haya colocado la pieza final en el lugar correcto, saboree el momento. Ahora analice cada detalle: el acogedor interior de la casa, la mujer joven, el niño, su relación, su historia.

De manera opcional, quite las piezas que representan las caras de la mujer joven y el niño. La madera oscura de la mesa se convierte en sus máscaras. La historia es ahora enigmática, aterradora quizá.

Como alternativa, desmonte la imagen y cree una nueva al azar a partir de las piezas, forzándolas a estar juntas aun si no encajan con exactitud. Deseche las piezas que no le gusten. Haga una forma extraña.

Si desea convertir su novela en poema, simplemente préndale fuego.

Finalmente, salga de la habitación y no regrese jamás.

 

Funeral

Todos de negro

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Sano esparcimiento

Cuando tenía doce años, le prendía fuego a todo lo que caía en mis manos. Hojas, varas, papel, libros, cuadros, mecedoras, cortinas, árboles, gente, casas. Lo que fuera, lo quemaba. Me encantaban las conflagraciones. Nada era mejor.

Me XXXXXXXXXXXXXX también, por supuesto, como a cualquier niño de doce años sano, pero no mientras las cosas se quemaban. Eso habría sido enfermo y retorcido. Yo XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXX
XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXX, fantasías sobre XXXXXXXXX

Tenía otros pasatiempos. Leía; escribía cuentos sobre hechiceras y un espíritu maligno llamado el Rey Pájaro; hacía dibujos del mar.

Prenderle fuego a las cosas y XXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXXX eran mis favoritos, sin embargo. En muchos sentidos, todavía lo son.

VERSIONES DEL INGLÉS DE VÍCTOR ORTIZ PARTIDA

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