*
Mirada.
De pie estoy a la orilla del río
   intentando comprender.
Invisible, mis ojos cuestionan el paisaje.
Un dibujo sobre el muro,
   otros aguardan en la bodega.
Miro el dibujo,
   lo miro.
Él dibujó a la chica; yo
   observé cómo la dibujaba.
No estoy en el campo. Estoy en el río.
¿Sabrá ella que él la mira?
La cabeza echada para atrás,
   la boca abierta,
sus brazos rígidos mueren, su breve
   pecho en espasmos.
Sobre el cojín el adiós es inminente.
Él pregunta, ¿deberé dibujarla?
   Lo veo titubear. Está
   asignado a estar ahí.
La cabeza, ligera como pluma, se sacude:
   caigo en el río.
*
   esa luz, la luz de las cinco
   la luz entre la oscuridad y el destello
   cuando el otoño se acorta hacia el invierno
   cuando se olvidan los relojes
   –algunas fantasías octagonales
   para la mirada de un artista,
   el rojo se convierte en verde;
   esa luz cubre todas las cosas
   en el húmedo nacimiento del alba–
   libros, paredes, tesoros pintados,
   todo cosido por una misma aguja.
   la mano levantada de un hombre,
   suelta, lánguida, justo
   como un chocolate en la chaqueta colgada,
   justo como un perro callejero como platón
   o enid blayton. todo
   está ausente; todo está presente.
   mira hacia la barba
   en la enorme mesa de roble, en esa luz
   no hay barba, no hay periódico,
   no hay vinagre, no hay barra del lado del torso.
   ¿y el color?, ¿el color?
   los rojizos pantalones son mera
   sopa gris, como el guardarropa
   esquinado —caldo de whisky,
   sopa de windsor, caldo de pimienta aguada,
   bóvedas luminosas en el espejo
   las mantas y muros
   mascullan en francés.
*
   este callejón una pared de ladrillo
   esto desde o es
   humareda donde noto el vapor
   opuesto a la pared
   humo mío de mí mismo
   es acerca de lo opuesto que ha humeado
   exhalado fuera de este supuesto
   desde la pared si algo
   callejón frente a callejón
   calefacción saliente del muro
   la humareda de la chimenea exhala
   humo de la fábrica de
   una humareda de humo pero
   ¿realmente humea la pared
   fuera del humo saliente
   del humo del vapor del
   apenas notado? y humo afuera
   la humareda verdadera del
   muro el ladrillo que exhala pero
   la casa el mismo callejón que he mirado
   exhalando el humo desde afuera
   esto esta humareda opuesta al humo
   es respirada desde y la calefacción
   el humo es realmente de
   de acerca de la casa de ladrillos
   exhalando su humareda exhalando humo
   la casa del callejón desde afuera
   afuera acera de afuera de
   el humo saliente de la humareda
   el humo del muro el
   humo no es la pared
   exhala un humeante callejón de 
   humareda fuera de sí ésa
   ése es el humo como la
   casa está humeando opuesto
   ¿realmente?
*
   El cubo está vacío;
   los policías expulsados.
   Esperaré un poco y escucharé
   el ritmo de los trenes
   —la música de la curruca parda.
Los días comienzan aquí
   en el agujero cavado en la arena.
   Quiero saber por qué
   el Atlántico no cabe en él,
   un cubo a la vez.
Solo, mi cabeza yace sobre la mesa de roble,
   historias y danzas terminan en sus pistas.
   Mi boca se abre —la policía está
   boca abajo en la mullida alfombra.
   Me acuesto a jugar.
Cambio lugares. Fuera de la ventana
   observo el cubo y miro
   mi cabeza. ¿Cuál se llenará primero?
   La pared de ladrillo al frente se mantiene firme.
   Presiono mi espalda sobre su certeza.
   30 de junio de 2014
Versiones del inglés de Rocío Cerón