Preparatoria 10
“¿Eres real?” Era una pregunta fuera de lo normal, pero la verdad no creía que aquel hombre de belleza inmensa me amara. Nunca había sentido aquello por lo que todo el mundo se atontaba, pero me estaba sucediendo a mí, una chica que creía en la frase "El amor no es un sentimiento, es una habilidad". Siempre me decía eso a mí misma, siempre me lo recordaba, y heme aquí perdida en los ojos color negro carbón de un chico, perdida en el calor de sus manos perfectamente posadas en mi cuello y mi rostro. Sólo dijo:
“Tan real como esto”. Y sentí sus labios dándoles sabor a los míos. Cada caricia, cada roce entre nosotros, me producía unas ligeras palpitaciones, y aquel era nuestro primer beso.
Sentí cómo la magia se desvanecía. Abrí los ojos de un sopetón cuando se apartó de mí. No quería que aquello acabara, así que lo tomé del cabello y lo atraje hacia mí de nuevo. Necesitaba saber cómo se sentía ser de él, única y exclusivamente de él, ya que por estas razones uno vive la vida.
El amor nunca muere, pero a veces uno lo deja envejecer y extinguirse.