Bichos de estimación / Sergio Ernesto Ríos

peces de armiño
azulejos petirrojos
tatuados bajo una lupa
soberana

tomo una carta
paso
multiplico la ofrenda del azar

el oro recto
en el escarabajo de la abuela
viene de áfrica
la cuna del matiz
de esa esmeralda

 

el perro envenenado
se escondió detrás del bambú

manchó el patio de sangre

la casa estaba rodeada de baldíos
luego dibujamos la ciudad
construimos edificios con la venganza de ícaro
las memorias de un billete de banco
y la llamada desde andrómeda

el frío gobernaba esas historias

murieron los jilgueros
la gata se fue
la muerte era un cráneo profundo
y una opaca línea verde entre los pómulos

 

como la mancha marrón
de los grillos que asfixiamos

sólo había grillos maleza estalactitas
 niebla
cimientos de casas con piso de tierra
un plato de lentejas
meriendas de avena y soya

un paralítico miraba un carrusel

a diario mi madre
quemaba mis anginas con petróleo

no odiaba la fiebre

 

era como entrar en un casco espacial
la distancia de mi cabeza a los pies
semejante a los baldíos alrededor de la casa

y la penicilina
al lado izquierdo del cielo
trataba de alcanzarme

 

 

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