Taller Luvinaria-CUCEA
Aquéllos cuyo amor supera todo no pueden ser separados por el mundo.
La muerte no mata lo que nunca muere.
… Tampoco de aquellas almas que aman y viven bajo el mismo principio divino podrán ser divididas jamás sus raíces y el legado de su amistad.
… La muerte no es más que cruzar el mundo, como los amigos cruzan los mares y continúan viviendo uno en el corazón del otro, aún así…
Es éste el consuelo de amigos que, aunque se digan muertos, su amistad está, en el mejor de los sentidos, siempre presente, porque es inmortal.