América grabada en el presente

Demián Flores

En América. Visiones nuevas desde el viejo mundo, Demián Flores construye una obra gráfica crítica que confronta el imaginario colonial con la violencia contemporánea. En este proyecto, el artista oaxaqueño dialoga con las estampas del grabador flamenco Theodor de Bry, cuyos libros del siglo XVI representaron de manera sesgada y fantasiosa la conquista del continente americano. Como señala Daniel Brena, Demián Flores «reutilizó estas imágenes para citar fragmentos de la historia del México actual, enfocándose en la violencia causada por el narcotráfico y los abusos de poder generados desde el gobierno», logrando que «tanto las imágenes de Flores como las de De Bry empaten en su nivel de crueldad».

La obra gráfica de Flores se articula en tres series: Buenos salvajes, Antropofagia y Destrucción de las Indias. En ellas, el artista no sólo reinterpreta visualmente las láminas coloniales, sino que las «deseuropeíza», como él mismo afirma, para introducir elementos contemporáneos, simbólicos y políticos que resignifican su sentido original. La curadora Lluvia Sepúlveda describe este gesto como un palimpsesto visual: «Flores crea una nueva narrativa para citar la historia reciente en México […] una nueva “colonización” efectuada por el crimen organizado, cuya virulencia se apodera de territorios y personas con la misma ferocidad que la de los conquistadores de América en el siglo XVI».

Joaquín Barriendos reconoce que el proyecto de Flores se inscribe en una genealogía crítica de las imágenes como territorios de poder. El grabado «opera como una tecnología civilizadora: convierte la alteridad y la lejanía del salvaje en materia visual consumible». La serie Antropofagia se inserta en esta economía de imágenes caníbales, donde «todas las imágenes tienen hambre. Todas se devoran entre sí», y donde Flores, al intervenir las planchas de De Bry, explora cómo la mirada europea imprimió la barbarie en el cuerpo del otro. «Es a esta economía antropófaga del libro y de la imprenta a la que el artista oaxaqueño ha dedicado sus últimas series de grabados», concluye Barriendos.

El arte de Flores también se sitúa en la tradición del grabado como medio de crítica visual. Juan Peiró lo plantea desde el lema «hazlo nuevo» de Ezra Pound, afirmando que el artista «vibra con la intensidad del presente en un equilibrio dinámico entre el peso de la tradición y el compromiso por el futuro». Peiró identifica tres momentos en el trabajo de Flores: con tradición, con contradicción y con traición. Es decir, una apropiación respetuosa de la historia gráfica; una tensión entre opuestos (pasado/presente, ficción/realidad, arte/artesanía); y una reconfiguración radical de esos elementos para crear algo nuevo, actual, político.

En esta línea, Antonio Alcaraz enfatiza la forma en que Flores desvela el grabado tradicional desde el arte contemporáneo. A través de técnicas fotomecánicas y de impresión digital, el artista «manipula, combina e incorpora a las imágenes elementos gráficos, pictóricos y textuales», como lo hicieron artistas como Baldessari o Rauschenberg. Sin embargo, lo singular de Flores es su diálogo con lo local y su trabajo en comunidad, como en el Taller La Curtiduría de Oaxaca. Su producción es colaborativa, arraigada en técnicas tradicionales, pero también provocadora y profundamente contemporánea.

Alfredo Bueno Jiménez, por su parte, ofrece el trasfondo histórico de la obra de De Bry y su influencia en la creación de un imaginario visual europeo sobre América. De Bry nunca pisó el continente, pero sus grabados —basados en crónicas y acuarelas de otros autores— definieron durante siglos la representación del «salvaje». Como explica Bueno: «la objetividad y veracidad de los temas queda en un segundo plano», pues lo que predominaba era un discurso eurocéntrico, político y religioso. Demián Flores retoma esa herencia para subvertirla desde el sur, devolviendo al grabado su función como arma crítica.

América. Visiones nuevas desde el viejo mundo es un ejercicio de contraimagen, de reapropiación crítica y de insurrección gráfica. Las tres series que lo conforman dialogan con una iconografía colonizadora para desenmascarar las violencias del presente, construyendo desde el arte un espacio de resistencia, memoria y transformación. Como señala Juan Peiró: «la poesía es un arma cargada de futuro», y en las manos de Demián Flores el grabado también dispara. 

Demián Flores (Juchitán de Zaragoza, Oaxaca, 1971) es un artista visual egresado de la UNAM. Ha expuesto en recintos como el Museo Reina Sofía (Madrid), el MUAC y el Palacio de Bellas Artes (CDMX). Representó a México en la Bienal de La Habana (2015), la Triennale Bovisa (Milán, 2007) y la Bienal de Sharjah (2003). Su obra forma parte de las colecciones del British Museum, el MOLAA y el Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca, entre otras. Ha recibido becas como la Pollock-Krasner y fundó La Curtiduría en Oaxaca, espacio de producción, formación y experimentación artística.

Este texto fue elaborado por Víctor Ortiz Partida a partir de los ensayos incluidos en el libro América. Visiones nuevas desde el viejo mundo de Demián Flores (Sistema Nacional de Creadores, Fundación BBVA Bancomer, Centro de las Artes de San Agustín, Amigos del Instituto de Artes Gráficas de Oaxaca y Centro Cultural La Curtiduría, 2019). 

Las imágenes de la obra de Demián Flores aparecen en Luvina por cortesía del propio artista. 

De la serie Destrucción de las Indias, 2016
Carpeta con 18 litografías
65 × 90 cm
Impresión: Taller Ochoa, Ciudad de México
De la serie Buenos salvajes, 2015
Carpeta de once aguafuertes coloreados a mano
28.5 × 38 cm
Impresión: Taller Tigre Ediciones, Ciudad de México
De la serie Buenos salvajes, 2015
Carpeta de once aguafuertes coloreados a mano
28.5 × 38 cm
Impresión: Taller Tigre Ediciones, Ciudad de México
De la serie Buenos salvajes, 2015
Carpeta de once aguafuertes coloreados a mano
28.5 × 38 cm
Impresión: Taller Tigre Ediciones, Ciudad de México
De la serie Buenos salvajes, 2015
Carpeta de once aguafuertes coloreados a mano
28.5 × 38 cm
Impresión: Taller Tigre Ediciones, Ciudad de México
De la serie Antropofagia, 2015
Carpeta de once aguafuertes
24 × 29.5 cm
Impresión: Taller El Chanate, Torreón, Coahuila
De la serie Destrucción de las Indias, 2016
Carpeta con 18 litografías
65 × 90 cm
Impresión: Taller Ochoa, Ciudad de México
De la serie Antropofagia, 2015
Carpeta de once aguafuertes
24 × 29.5 cm
Impresión: Taller El Chanate, Torreón, Coahuila
De la serie Buenos salvajes, 2015
Carpeta de once aguafuertes coloreados a mano
28.5 × 38 cm
Impresión: Taller Tigre Ediciones, Ciudad de México
De la serie Buenos salvajes, 2015
Carpeta de once aguafuertes coloreados a mano
28.5 × 38 cm
Impresión: Taller Tigre Ediciones, Ciudad de México
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