La esencia del erotismo reside en la inextricable asociación
del placer sexual y de lo prohibido.
G. Bataille
*
Cierras los ojos
y descubres un desierto de agua
una celda con dunas y pájaros.
Llega la noche
y su luz anónima
es un cilicio que nos aprieta el pecho
los pulsos de la respiración.
*
Llueve sobre las ruinas
sobre los charcos del invierno.
Contemplo esta sílaba sagrada
sus huesos
empapándome el licor de la sangre.
Entre las sábanas, la fruta incandescente.
Duermo.