Taller Luvinaria CUCEA
Nos perdemos a propósito en este laberinto de tela y piel,
en el que es más importante encontrar la entrada que buscar la salida.
En el que a cada paso que se cierra es una oportunidad
y con cada paso abierto se acaba un poco mi esperanza.
Donde nuestra realidad está entre todos esos pasillos que se cruzan
y en las afueras sólo hay una ilusión
donde conocernos a nosotros dos nos hace que nos internemos un poco más,
y en el que salir no es una prioridad.
Estamos en el laberinto que hoy hemos forjado encima de la llanura que ante nosotros encontramos.
Que entre montañas, manantiales y oasis que pudimos forjar, hemos elegido crear nuestro propio laberinto, en el que siempre que queramos nos podremos adentrar.