1.
Si el sol a medianoche
roza bordes peligrosos de la mente,
dejo mis preguntas a la deriva
entre el sustrato oscuro
y las ondas epidérmicas.
Si las preguntas se cierran
porque están respondidas,
y las respuestas se abren
en la boca del tritón sobre la fuente,
son chorro diamantino,
un borbotón constante,
sin sentido.
2.
La mirada lee en el espejo
una fatiga mortal de seguir vivos.
Los macetones de la avenida
están llenos de flores—
pálidos pensamientos
o no-me-olvides
pálidos,
fugaces
como el verano nórdico.
3.
Emerge una canción
en la terraza del bar.
Inmigrantes aglutinados
en la barra del fondo.
Incisiva,
felina,
la mirada
deja una marca en carne viva,
rotura la tarde
con sus lastres anónimos.
Helsinki, solsticio de verano de 2003