[Sin título] / Mónica Cisneros

Preparatoria 16 (UdeG)

Todo el día sentado frente al mar, pensando en lo que va a hacer de su vida, con la mirada triste enfocada hacia el horizonte donde los pájaros luchan por el alimento, se abandona suavemente; sólo él sabe que sus ojos no pueden ver más allá, sólo la triste vida que lleva y que no puede dejar, aquélla en la cual no está cerca la felicidad.
 
La gente lo ve con asombro, porque no pueden creer que pase todo el día sentado frente al mar, con la mirada profunda como el océano, sin poder distinguir si aún está vivo.

 

 

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