Taller Luvinaria-CUCEA
Lejos de volver, el hombre de corbata chillante se topó con una libreta roja de hojas en blanco. Conociendo de su tardanza, decidió conseguir una pluma y empezar a escribir.
Al tomar la libreta, dio un suspiro y decidió sentarse en el pasto húmedo para escribir de su inspiración.
Había decidido tomarse unos segundos de calma y tranquilidad en su ajetreada vida para redactar… Así que prosiguió… Tomó la pluma verde, cerró los ojos y anotó: “…Llevo prisa”. Leyó de nuevo: “Llevo prisa”. Y se echó a correr.