Just as Every Cop is a Criminal and All the Sinners Saints, as Heads is Tails, Just Call Me… The R

Just as Every Cop is a Criminal and All the Sinners Saints, as Heads is Tails, Just Call Me… The Rolling Stones / César Arístides

a Felipe Ramos, Érik Ramírez, Xavier y
Juan Montiel, Fernando y Óscar Gil,
Érick Roberto y Juan Marcos Cruz:
Stoneds de mi adolescencia…

aúllan las anfetaminas en los sótanos
iguanas lascivas en el júbilo del cementerio
sus bocas de lava remuerden la noche
retumban sus dardos en miradas cerúleas
relámpagos tercos en vulvas y tráqueas
erizan la queja la gruta y el trueno
eléctricos soles encarnan lo oscuro
la bruma filosa la espalda del miedo
fractura de seda y gemido al barranco
es hora enervada del pálido rito
y cuando al fin gemido las rocas crascitan
las nubes violetas dibujan los cuernos

el cielo es requinto de hielo en la fiebre
y ninfas pasmadas navegan la hiedra
dónde las esquirlas y la luna anaranjada
en qué crepúsculo beben las dagas sortilegio
si el amor es un perchero esquizofrénico
cuando la música tropieza en sus fisuras
ronda en el mareo la cadera del recuerdo
así la voz desbarrancada en los presagios
destaza el terciopelo de la nostalgia

el ronco gemido resbaló por calabozos
susurro quebrado es bengala noctívaga
vodka son daga en la piel de alborada
cuando al fin el lecho es un pantano
y las mortajas entibian a los cadáveres
gruñen los espejos a los pétalos trabados
se desboca el piano lame los barrancos
eleva sutil su aldea de perdularios
árboles de lumbre deliran en lo obsceno

han pasado cinco décadas de truenos
turbas raspadura y torbellinos
jeringas en la duda alcoholes en los muslos
y la vida es ansiolítico de moscas
han pasado sirenas condolidas en el humo
los escombros son rostro en la distancia
oda huesuda invoca el rasguño de la cocaína
aletean sobre tambores los espantapájaros
y un latido volcánico de criptas
de gusanos tornasoles en el celo
eleva su cantata para duendes y cerezos
su danza troquelada por la rabia

saben los reptiles que son anhelo sucio
indolencia azul mecida en la botella rota
donde colmillos audaces dibujaron resplandor
son mueca hastiada de alcohol viejo
lo saben en cada canción despeñada
brebaje espeso que aturde a calaveras
en días de lluvia azoro y ventanas irascibles
son alfiler helado sobre el musgo del vientre
rumor de sapos zafios en zafiros y zumbidos
degradan la promesa calcinan el silencio
son vinagre helado en labios de la melancolía
las satánicas majestades vestidas de dragón
son décadas rudas de fulgor intoxicado

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