Río orgánico / Laura Solórzano

Una pastilla sustraída
una posición de azúcar
en una letra
una letra directa
emotiva puerta cerrada al entero cuerpo filosofal
la piedra
mi piedra es prisionera de mi podio

En mi podio he escuchado decir
una letra es una partícula transitiva y tentativa
tanto como yo
tan lejos como yo
trémula al pensar que tocaría ese poder
menor y minúsculo

Con una sola parte, entiendo
con ingrata dulzura
con un quehacer que participa
contigo, piedra, pastilla de letras azucaradas
mi comezón
podría empezar a romper, a parir,
a proyectar voces sobre voces
ecos desde el podio de mi yo perdido
pienso en otro momento, no en éste
participo en otro poema, no en éste
en éste corto
no me llevo del cabello mi raspadura
no me sitúo en cada desecho
no me doblo

Aquí respiro y regreso

hacia la letra ahogada
vengo por la puerta de la piedra filosa
pienso,
una falla que la forma propone
una funda de documentos famélicos

Aquí veo que respira mi radio
y mi razón recorta, pero yo
entre las rejas de este rato
rezo
rezo al reptil
al calmo rectángulo de mi mente
a la piel fría.

 

 

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