Prosas a la lujuria / Brian Miguel Ángel Andrade Cortés

Preparatoria 5 / 2014A

Acaricia, ¡revive esas caricias!
¡Desvanece mi inocencia sumergida en profecías!
¿Dónde los dioses han ocupado mi infancia? Apocalipsis.

Minutos, días  y años (quedar condenado)
máscaras, dedos oídos y comisuras (engañar la ternura)
borran las horas donde el acto no ocurrió.

Anudado en el profundo mundo prostituto,
nidos elaborados de esquirlas girando en el tornado de eyaculaciones
nos recuerdan a los amantes de este mundo puro.

Día y noche nos marcamos huellas:
hilos elevados con corolas girasoladas.
¡Movamos los muslos trazando el llanto de los grillos
y agitemos hasta tragar calor en manantiales!

Aplicas cirugías con tus uñas,
 mi sangre borbotea de lujuria.
Las gotas de sudor, los chorros de esperma
            y el precoz derrame sanguíneo mezclados en un cáliz
los bebemos y tiramos en el jardín donde nazca un nuevo arco iris.

 Mi inteligencia ha muerto, me conduce el instinto,
cada acto (1, 2, 3 e infinito) es un latido sin sentido.
Ya no importa el juicio que nos culpará…
…impongamos que amar…
…es ese desafío realizado por los dos.

Nos flagelan las imágenes:
“arrugar el delirio vano”
“sostener tu figura en la alcoba”
 “navegar en burbujas de perversión anhelada”
“germinar lirios pornográficos”
 “aullar a las bestias del firmamento”
 “cazar adictos parafílicos”
 “arrastrar culebras cubiertas de dopamina” 
¡Venerar, lujuria! ¡Venerar!

Masoquismo, pedofilia,
 bestialismo, necrofilia…
todo produce miedo y gritos a los espíritus…
 somos unos fenómenos. 
¿Terminamos? ¿Qué más da si la divinidad nos rechaza?
Construyamos                                                        un puente
del Olimpo           a            tu vientre
 su base serán los  lamentos                         y                         su fuerza lo erótico de la mente.  

Y  reinventemos un mágico lugar
 ahí trasnochemos nuevamente.
Decorar el ambiente…
insertar rosas silvestres y bañar las mariposas de Moscú con ADN.
Después de llegar a la debilidad…
como esclavitud del placer
déjame guiar tu ingenuidad.  

Con el tacto de tus garras en nuestra piel enjuga…
 los abismos inciertos…
… reales de mi ser.
 Con tus dedos mezcla las vidas…
 al pulso del tímpano de Beethoven y como él juega a expirar sonidos nuevos de locura.  

¡Cierra tus párpados inundados bajo fluido!
Atravesaré la luz de tus caderas
y esconderé los besos de aire en mis ojos.
¡Deja de ser egoísta!
¡Deja ver tu identidad desnuda!

Tu máxima belleza en una fotografía…
                        …enviarla al mundo…
            …causará discordia,   pérdida de razón
y en esa vorágine dispararemos savia.

La luna se cansa de ver piruetas,
piruetas de titiriteros…
            …con alfiles de orgías
                        guardo recuerdos en el espejo.

Punto final. Quedar complacidos.
Destruyamos el veneno de la castidad.

Abundan sermones e introducen aromas
 bañados de cobres que alientan las nubes…
            la agonía, retratan en mi palidez cálida y carmín…
…los ordinarios  tienen piel nieve y fobia a petrificarse,
observan en el planeta un ciclo redondo
 sin necesidad de instantes, momentos traidores;
 olvidaron el sabor que provoca nuestro vivir. 

Soy chamán, invento bolsas de eco…
…que encierren la moral en cadenas para…
 …no volver a ser castigados
 …volver a ser sombras de perdón.

 

Lujuria: mezcla de perversión,
 dolor, entrega y enfermedad.
Amor, en cambio: eternidad
adversidad, felicidad y perfección.

Apocalipsis:                                                 te amo           
                                                            te infinito    
                                                y            te eterno…

Ahora…
            congelo mis verdades,
            dejo de sentir para empezar a pensar.
  

                      

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