Tener un reloj es cosa de valientes / Diana Narváez Córdova

Preparatoria Regional de Lagos de Moreno / 2013 B  

Valiente es quien ve la hora cada 5 o 10 minutos
y ve a la vez cómo se muere.
Valiente es quien ve pasar los meses,
sus cumpleaños, desde el 96 hasta hoy
y ve el reloj, el espejo de la angustia.
Valiente es quien come un pan con mermelada
20 minutos antes de entrar a la oficina
que queda a 30 minutos de su casa.
            Valiente es quien tiene agendas llenas
                            y no se conoce.
Valiente es quien se compra un reloj lujoso,
valiente es quien enseña a sus hijos
que sin reloj
todo sale mal.

Es de valientes mirar a la persona amada
y enseguida dar un vistazo a la hora,
valiente es quien llega a su casa y se quita los zapatos
el pantalón
la cabeza
el corazón y los brazos
los cuelga en sus manecillas
y viste su pijama
corazón de concreto
brazos de agua
cabeza de almohada mojada
y duerme a las 11:30.
Valiente es quien piensa en el tiempo,
en la nada.
Es de valientes tocar el ukelele
y tocar 40 minutos diarios
de 5:20 a 6:00 de la mañana.
De valientes es mirar el reloj en la ducha.
Es de valientes estar a solas con tu reloj
estar solo
sólo con tu ansiedad.
De valientes es no cambiarle la funda a la almohada
pero sí la hora al reloj
cuando empieza el verano.
Es de valientes arreglar otro reloj que tenías guardado.
De valientes es escuchar
todo el día
en tu cabeza
el tic tac
porque olvidaste la voz de tu mujer.
Es de valientes tener hasta cuatro relojes
en casa.
Es de valientes
tomar pastillas para los nervios
pero no tirar
a la basura
ese pedazo de infierno.

 

 

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